“REVERSA SINCRONIZADA” …PORQUE SE VALE EQUIVOCARSE Y CAMBIAR DE RUMBO
Publicado de Susana Soto en #Coaching · 12 Agosto 2020
Seguramente has escuchado alguna vez la frase de dominio público “para atrás, ni para agarrar impulso”, haciendo referencia a que no debemos mirar hacia atrás en ninguna circunstancia, a tener el valor de seguir adelante a pesar de todo. En mi personal punto de vista, considero que hay mucho más que poner en contexto antes de aplicarla, porque en nuestro día a día cada decisión que tomamos conlleva el riesgo, totalmente válido, de equivocarnos o de darnos cuenta de que es necesario hacer ajustes y esos ajustes implicarán mirar al pasado. Sí, mirar atrás, porque atrás está lo que fuiste, lo que te abrió camino, lo que te forjó, y habrá veces en que será necesario hacer una pausa en ese camino, volver a analizar y cambiar de dirección.
Hace algunos años, tuve la oportunidad de implementar un proyecto de Transformación Digital en una empresa en Bogotá, Colombia, y fue ahí donde por primera vez escuché el término “Reversa Sincronizada”. La Gerente del área en aquel momento me lo explicó de una manera muy sabia y me hizo replantearme muchas creencias en lo relacionado a la toma de decisiones. La Reversa Sincronizada es saber reconocer con la suficiente objetividad y humildad, que es necesario hacer un alto en el camino para cambiar de dirección. ¿Implica echarse un poco hacia atrás? ¡por supuesto! pero no por rendirse o por miedo a avanzar, sino porque se ha reconocido que ese camino que originalmente se tomó fue equivocado o no era el mejor para lograr el objetivo. Implicará también librarse de apegos, de no aferrarse a que las cosas funcionen como uno quería y abrirse a las posibilidades que ofrece un nuevo rumbo. Imagina que simplemente pusiste una dirección equivocada en tu navegador y cuando te das cuenta, tienes que corregirla, el sistema recalculará y seguramente tendrás que echar reversa y conducir hacia el camino correcto.
En estas épocas y como resultado de la pandemia, muchos nos hemos visto en la necesidad de aplicar la Reversa Sincronizada: el empresario que tuvo que cerrar su negocio y buscar opciones por medios digitales para mantenerlo a flote; el comerciante que perdió ventas de un producto que dejó de tener demanda, pero empezó a vender otro en el que encontró una oportunidad de negocio, el profesionista que se quedó sin empleo y tuvo que pivotear para aplicar su conocimiento en otras industrias, en el autoempleo o emprendimiento, o incluso, aprender algo nuevo para poder encontrar una oportunidad en el mercado laboral. Totalmente válido y necesario…y agregaría incluso, sano, porque no podemos sentarnos a esperar que las cosas cambien de rumbo por sí solas, mucho menos si ya reconocimos que hay alternativas.
Sin embargo, el replantear el camino lleva implícito volver a tomar decisiones y es ahí donde aparece nuevamente el pánico. Nos volvemos a cuestionar si estaremos haciendo lo correcto, si no convendrá esperar, y todas esas preguntas que nos bombardearon la primera vez… “Y si me vuelvo a equivocar? ¿Y si me critican? ¿Y si me arrepiento? ¿Y si…?
El riesgo de equivocarse siempre estará presente, pero de los errores se aprende y no debemos temerles porque quien se equivoca simplemente demuestra que estuvo en movimiento, que entró en acción. Eso sí, hay que tratar siempre de minimizar dicho riesgo, tomando nuestras decisiones con mente y corazón y eso incluye estos puntos que en lo personal yo considero fundamentales:
a) Analiza muy bien y con objetividad “pros” y “cons” de tus opciones, teniendo mucha claridad en qué es lo que quieres lograr.b) Apóyate en un experto, ya sea a través de coaching o mentoríng.c) Pide opiniones a otros que ya hayan recorrido un camino similar. Solo ten cuidado, pedir opinión no significa que pidas que te digan qué hacer, sino que te den puntos de vista pues quizás haya cosas que tú no estás considerando o no te has percatado. Al final la decisión es tuya, pero los elementos de análisis se enriquecen cuando tienes otras perspectivas.d) Haz caso a tu instinto. Suele pasar que todo tu análisis te indica un camino, pero hay esa sensación en tu piel y en tu corazón que te dicen “por ahí no es”. Hazle caso y escúchate con atención, ninguna decisión que no te de paz será la adecuada.e) Si te equivocas, no pierdas tiempo en buscar culpables, o lo que es peor, en sentirte culpable. Tampoco en enlistar cientos de “si hubiera…” Solamente aprende del error, identifica en dónde pudo haberse evitado y tómalo en consideración porque ahora forma parte de tu experiencia.f) No tengas miedo de replantear…para eso se hizo la reversa. Reconoce el error, vuelve a mirar opciones y con valor corrige el camino…porque ese puede llevarte a donde realmente debías ir.Susana SotoOaxaqueña de nacimiento, regiomontana por adopción y colombiana de corazón, Susana tiene estudios a nivel profesional y de maestría en Administración de Empresas, pero se ha desempeñado durante más de 23 años de trayectoria profesional en el ámbito de la Consultoría, tanto en Servicio al Cliente, Optimización de Procesos e implementación de proyectos de Transformación Digital, en México y Sudamérica. Disfruta conectar con las personas para aprender y aportar. Es amante de los libros, los viajes y la práctica de Yoga, y pertenece a diversos clubes donde puede conectar con personas que disfrutan de esas mismas pasiones.mx.linkedin.com/in/susanasotov11susana_soto_v